Realizar un análisis exhaustivo sobre los efectos psicológicos del ciberacoso en la víctima requiere de elementos tan importantes como la obtención de datos empíricos contrastados que en muchas ocasiones poder acceder a ellos es complejo. No obstante, desde la perspectiva psicológica podemos establecer de forma general algunas de las consecuencias psicológicas derivadas del acoso tecnológico. Humillaciones, burlas, amenazas y difamaciones se traducen de forma progresiva y repetitiva con la única intencionalidad de hacer daño a la víctima.
Hay que destacar que el ciberacoso está presente las 24 horas del día de manera virtual. La víctima es consciente de que aunque apague el teléfono o el ordenador, a través de la red se está propagando mensajes hirientes o rumores hacia su persona.
¿ De qué manera puede afectar a su autoestima? ¿ qué sentimientos se generan? ¿ cuáles son las consecuencias a corto, a medio y a largo plazo?
A corto y medio plazo la víctima experimentará estrés, humillación, ansiedad, ira, impotencia, incertidumbre o fatiga; y, aunque en pocos casos se suelen presentar enfermedades físicas, en gran parte de estas situaciones el individuo acosado tiene una enorme pérdida de confianza y control en sí mismo.
El afectado tiene un descenso en su rendimiento, además de provocar secuelas psicológicas y emocionales con una autoestima fuertemente lastimada.
Las secuelas psicológicas a largo plazo pueden ser muy variadas en función de la personalidad de la víctima. Según Marina Parés Soliva, en “Peritación Social del Mobbing” los supervivientes de acosos prolongados desarrollan cambios de personalidad propios de estrés postraumático, incluyendo alteraciones en la capacidad de socialización.
Después de los acontecimientos violentos del ciberacoso las víctimas revisan y juzgan su propia conducta, y los sentimientos de culpa y de inferioridad son prácticamente universales.
En este artículo hemos reflejado el ciberacoso y sus consecuencias en una persona de forma general. No obstante, trasladado al mundo del ciberacoso escolar tenemos que tener en cuenta que el impacto en los menores es mucho más severo debido a su falta de habilidades de afrontamiento y a su precoz desarrollo psicoemocional. En este sentido, los adultos ya no solamente debemos proteger a nuestros menores, sino también empoderarles de estrategias de afrontamiento para saber autoprotegerse de forma autonóma e independiente.
